La idea de la casa propia debe ser un gen que viene en nuestro cuerpo, como objetivo primordial y centro de nuestros desvelos a lo largo de la vida. O de la muerte.
Estas son obras del escultor Frodo Mikkelsen, con inspiración en casas, que le dan un nuevo concepto a la muerte como soporte o base de una casa.
Qué tal la idea. Tenebrosa para algunos, original para otros, pero sin duda no indiferente.
La muerte como leiv motiv para un muestrario de casas, es una idea inquietante que ha recibido diversos premios y mucha atención sobre el artista.
Necesitas una casa, puedes acceder a un muestrario diseñado por Frodo, curioso nombre con semejanzas a cierto personaje del Señor de los anillos. Qué les parece.
El irreverente diseñador, no sólo se toma a la muerte como piedra basal para su obra de casas, sino en otros objetos, jarrones, cuadros, objetos inesperados, mayormente.
Resignifica aquella frase de “tengo mi casa en la cabeza”.
El artista danés, cuenta con una colección de estos particulares cráneos, que con un color a veces dorado, a veces plateado logra un nivel de detalles en estos objetos, realmente admirables.
Estas esculturas monocromáticas con la integración de cráneos y arquitectura es una forma de interpelación del artista entre mundos que parecen contrapuestos, la muerte o su representación, el deseo de la vida, su refugio; el ensueño de la casa, objeto de deseo en vida, integrada al objeto que representa la muerte.
Una extravagancia que da que hablar en la comunidad artística.